En la
madrugada del domingo en una discoteca del centro de Baní, dos
jvenes banilejos fueron apuñalados y baleados por un camarero deun centro de diversión, donde víctimas y victimario eran empleados
regulares.
Además, el agresor Ariel Humberto Rosario Celado,
de 22 años, detenido en el Palacio de la Policía Nacional, hirió
también, en el mismo hecho, al administrador de la discoteca Altus
Lounge Bar, donde ocurrió la tragedia, Ariel Mejía, de 28 años, quien se
debate entre la vida y la muerte en un centro clínico de la capital,
debido a la gravedad de la herida que le causó el disparo que recibió en
la nuca.
Las dos personas muertas son Guillermo Antonio García
Beltré (Junior), de 31 años, y Miguel Onésimo Ruiz Ortiz, (El Mello) de
24 años.
El trágico suceso ocurrió a la 1:40 de la madrugada del
domingo, según certificó el médico forense, Walter López, que hizo el
levantamiento de los cadáveres, quien explicó que la primera víctima
Miguel Onésimo, fue sorprendido cuando pasó al depósito del negocio en
busca de hielo, donde fue degollado por Ariel Humberto, con una arma
blanca, y además le hizo un disparo de pistola en la cabeza; luego, con
el celular de Miguel llamó a Guillermo García, diciéndole que pasará al
depósito que se había dañado una bomba de agua, y apenas se asomó
también lo acuchilló y le disparó en la cara, con la misma treta llamó a
Ariel Mejía, a quien también le disparó en la nuca, cuando Mejía al ver
la escena de horror se disponía a salir corriendo.
García Beltré era hijo del presidente de la filial del Colegio Médico
Dominicano en esta ciudad, Guillermo García, un reconocido médico
banilejo. Mientras que Ariel Mejía, el administrador del centro, es hijo
de José Mejía, otro connotado profesional banilejo de la ingeniería
civil. Escenas desgarradoras de dolor se vivía ayer en el seno de estas
tres familias, compungidas por el dolor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario